Las inundaciones afectaron nuevamente al norte argentino

Las lluvias de fin de marzo y principios de abril complicaron mucho a la provincia de Chaco. En Hermoso Campo cayeron 350 mm y el promedio en las demás localidades fue de 200 mm (Charata, Gancedo, Pinedo y Las Breñas). El problema se agrava con las aguas que bajan desde el oeste del Chaco, de los lugares en donde llovieron entre 375 y 450 mm.

Juan Monín, delegado de la SRA dijo: “Los caminos están intransitables y la situación es muy complicada. En Chaco las precipitaciones están afectando la cosecha de algodón que ya había empezado, que tiene unos muy malos y la cosecha de la soja todavía no está afectada porque estaban faltando más o menos 20 días para empezar a cosechar”.

El delegado de la SRA agregó: “El pronóstico es de dos días de sol, después llovizna, sol, baja de temperatura, por lo que vamos a tener una campaña irregular”.

En Santiago, salvo por algunos lotes donde hubo corrida de agua, no hubo problemas.

La vacunación está suspendida porque no se puede entrar a los campos ni encerrar hacienda.

“La logística va a ser complicada, los productores usamos mucho los caminos del Chaco para enviar cereal pero están totalmente destrozados y algunos se convirtieron en canales. Las comunicaciones están muy complicadas”, explicó Monín.

Hasta que se haga un relevamiento final, se calcula que la cantidad de hectáreas afectadas, son más de 400.000, en la zona denominada Chaco Santiagueño.

En Chaco hay personas evacuadas. La Intendencia pidió más móviles de rescate y un hospital móvil para la atención de las familias afectadas.

La situación en general es grave y para el campo más grave todavía ya que el sudoeste va a sufrir una falta de recursos importantes porque no va a poder cosechar nada.